Calibration Check Technology
ifm ofrece una alternativa a la calibración convencional: el TCC.
Gracias a la Calibration Check Technology, el TCC detecta su propio comportamiento de deriva. Para ello, el sensor compara el valor de temperatura con un valor de referencia medido al mismo tiempo. Si la diferencia está fuera del valor de tolerancia (ajustable de 0,5 a 3K), el TCC lo indica visualmente y lo notifica al sistema de control central a través de IO-Link y de la salida de diagnóstico. Lo mismo ocurre en caso de una avería grave.
Para comprobar el estado de la calibración, también se documentan las horas de funcionamiento, los valores de temperatura y de deriva, el límite y el estado, con la ventaja de cumplir los requisitos de muchas normas.